Si bien el método Busquet se usa en el contexto de la Kinesiología o fisiatría, hoy veremos un poco qué propone y sobre todo ¿Qué contemplan las recomendaciones alimentarias?.
¿Qué es el método Busquet?
El fundador del método Busquet fue el fisioterapeuta francés Leopold Busquet hace más de 35 años y el método mismo ha ido evolucionando desde su creación.
Este consiste en entender al cuerpo como una organización en cadenas. Es decir, como una sucesión de hechos que se van enlazando y conectando entre sí.
Según el kinesiólogo Pablo Maccari, el método Busquet debe ser utilizado exclusivamente por fisioterapeutas o médicos ya que es un método de diagnóstico.
¿En qué consiste el método?
En principio, el método Busquet consiste en un interrogatorio del profesional con el paciente sobre sus patologías, lesiones, dolores. Luego se realiza un exámen físico postural y funcional donde se busca observar compensaciones ante determinados movimientos.
Una vez terminada la primera parte, se debe hacer un balance entre lo observado por el profesional y el motivo de consulta del paciente y, a partir de ello se obtiene la base para comenzar con el tratamiento. Este se basa en técnicas de relajación, masajes, técnicas de propiocepción, de realineación y dinamización.
Es decir, se parte del método como técnica complementaria.
El método Busquet organiza al cuerpo humano en dos tipos de cadenas: dinámicas y estáticas.
Las cadenas dinámicas son aquellas orientadas al movimiento, esto quiere decir, que están relacionadas con lo muscular. Con el correr del tiempo y a lo largo de su práctica, Busquet se fue dando cuenta que había algo más que lo muscular, ya que solo con ese abordaje el paciente no se terminaba de sanar. Es así que agrega las cadenas estáticas, que son la músculo esquelético, neuromuscular y el sistema visceral.
La “organización” de estas tres cadenas sería de la siguiente forma: en un plano posterior se encontraría la músculo esquelético, luego le seguiría la neuromuscular que, en palabras sencillas, sería la conexión cerebral con los músculos. Y, por último, encontramos el sistema visceral, es decir, de los órganos.
Si bien se destaca que no se vincula con la alimentación, en los ejemplos que brinda Maccari menciona que si por ejemplo, la persona tiene hinchazón a nivel abdominal va a condicionar el rendimiento del mismo deportista.
Se da el siguiente ejemplo: “ tenemos tres edificios, uno adelante del otro. Resulta que viene un arquitecto y dice que uno de ellos se ve bastante inclinado que debería ponérsele una pared de ladrillo para enderezarlo. Viene un ingeniero y dice que habría que ponerle dos columnas a otro de los edificios para sostenerlo, viene otro y dice que hay que construir una pared delante del otro edificio para sostenerla más cómodamente y por último, se acerca una ingeniera con mucho conocimiento y dice, ¿Cuál es el problema general que está haciendo que todo se vaya inclinando?. Este ejemplo, es la representación de aquel deportista que sufre de alguna lesión y lo atienden diversos profesionales y todos le dan un consejo para mejorar ESA zona o ESE dolor particular sin ahondar en qué fué lo que hizo que se produjera esa lesión.
Como menciono anteriormente, si bien Paulo Maccari señala no tener relación directa con la alimentación, en su ejercicio profesional, con el plantel de basquet, señaló que para evitar la inflamación se recomendó el ejercicio en ayunas, evitar los cereales, carnes rojas, legumbres, azúcares. Esta recomendación va en contra de todas las investigaciones científicas que demuestran que el entrenamiento en ayunas no ha demostrado beneficios algunos, omitir cereales y legumbre en la alimentación del deportista es el error quizá más grande desde el lado nutricional, ya que, como mencionamos en otros artículos estos grupos de alimentos son fuente de hidratos de carbonos, fuente de energía principal para el organismo y más aún en deportistas.
Conclusión
Si bien el método Busquet promete un abordaje integral del deportista, se debe tener en cuenta en cuanto a lo alimentario, en quiénes funcionó, por qué y en qué deporte teniendo en cuenta como es el desgaste físico del mismo.
Esto es muy importante ya que, hablar de alimentación tan libremente, sin explicar el contexto y la situación individual puede llevar a que cualquiera que lea o escuche de esto cambie su alimentación contribuyendo a disminuir su rendimiento y volver su cuerpo, más vulnerable a posibles lesiones.
Por otro lado, si la persona tiene alguna afección que se pueda resolver con alimentación, el nutricionista o dietista evaluará cuales son las mejores recomendaciones alimentarias para brindarle a la misma.
Esto vuelve una vez más a concluir que todo cambio o recomendación que tomemos, la consultemos con el profesional correspondiente para no perjudicar nuestro cuerpo y rendimiento.